lunes, 27 de junio de 2016

Estructura Socioeconomica de México

El “Desarrollo Estabilizador” fue el período en que la economía mexicana se vio caracterizada por un alto crecimiento de la producción, bajas tasas de inflación y estabilidad en el tipo de cambio. Esta estrategia de desarrollo comenzó a finales de la década de los 50 y concluyó a finales de los años 60

 

La política adoptada en términos monetarios y fiscales fue ortodoxa. Si bien el gobierno continuó con una política de gasto expansiva, ella no generó grandes déficits fiscales. Durante la década de los 50, dicho déficit fue de 0.03% anual. Además de bajos niveles de deuda, es fundamental recalcar el destino del gasto; es decir, no sólo hay que tomar en cuenta la cantidad, sino también la calidad de éste.

El componente más importante del gasto gubernamental fue la inversión en infraestructura básica, principalmente en el apoyo a la actividad petrolera, la construcción de carreteras y el mejoramiento de servicios de salud y educación.

Si únicamente consideráramos estas políticas, observaríamos un incremento de la demanda agregada de la economía, impulsada principalmente por un aumento en el mercado de bienes. Así, habría crecimiento del producto, pero también se darían presiones inflacionarias. Sin embargo, ésta última no es característica del Desarrollo Estabilizador. Nuestro análisis estaría incompleto si no consideramos las fluctuaciones que presentó la oferta agregada.


CIUDAD DE MÉXICO.- En 1970, Luis Echeverría tomó posesión como presidente. La sucesión presidencial no fue sólo el cambio de hombre, sino el cambio de retórica. En palabras de la maestra Valeria Zepeda: “El Desarrollo Compartido fue un plan de corte populista que buscaba compartir los beneficios del crecimiento y una alianza entre obreros y campesinos”.
 


En los primeros meses de la presidencia de Echeverría el nivel de actividad económica estaba deprimido, en parte por el menor gasto gubernamental por ser inicio de sexenio. Para poner en marcha a la economía se decidió llevar a cabo varios proyectos de inversión, aun cuando éstos no fueran relevantes. El objetivo era aumentar la producción en el corto plazo.

Como economistas, más que el nivel del PIB o su tasa de crecimiento, lo que debemos analizar es el bienestar de los individuos. La reactivación de la economía vía gasto del gobierno aumentará la producción, pero si este gasto no es utilizado en la creación de bienes o en la inversión de proyectos lo suficientemente valiosos para la sociedad, entonces el gobierno tan sólo empeorará la situación de las personas pues estará desviando recursos a actividades de poca productividad.


López Portillo. Alianza para la produccion
1. ALIANZA PARA LA PRODUCCIÓN  - José López Portillo recibe al país con una situación económica muy difícil: Disminución en el PIB Déficit de las finanzas públicas Continuo incremento de la inflación Aumento en la deuda externa mexicana ● Su proyecto de Gobierno consistiría en un programa dividido en tres etapas 1. Superar la crisis 2. Consolidar la economía 3. Expansión acelerada

2.   - - Iniciando una política de reconciliación con los sectores empresariales, propuso a los empresarios su programa denominado “Alianza para la Producción” pues serían un factor importante para aliviar la carga pública. Reforma en materia hacendaria: Énfasis en la participación del sector empresarial Mayor progresividad al impuesto sobre la renta a personas físicas
3.   Se aplico una política de austeridad absoluta que para el pueblo se tradujo en un tope salarial del 10% y en el crecimiento de los productos de consumo básico. Esto se firmó con un acuerdo de estabilización con el FONDO MONETARIO INTERNACIONAL (FIM)  “La alianza para la producción” se consolido como una política propuesta para superar la crisis apelando a la unidad de la burguesía en torno al régimen.
4.   Con esta propuesta el desarrollo económico descansaría en la actividad empresarial, correspondiendo al Estado respaldar la acumulación privada a través de apoyos financieros, estímulos fiscales, insumos a precios adecuados y mano de obra barata y eficaz. La acumulación del capital seguiría el rumbo del apoyo estatal y explotación social
5. LA REFORMA ADMINISTRATIVA Portillo inicia un proceso de modernización de las actividades del gobierno federal y de las relaciones con la sociedad.  Ésta reforma buscaba que los recursos que manejaba el gobierno federal se administraran eficientemente, esto significaba que las prácticas de corrupción debían erradicarse y disminuir la burocracia del estado.  Se construyó con la idea que la clase empresarial se conformara como un grupo eficiente y productivo. 
6.  La política aplicada en el sexenio de Portillo construyó la idea de que todos los grupos políticos debían participar en la superación de la crisis, obreros, gobierno y empresarios, pues tenían cierta responsabilidad en la recuperación del crecimiento económico.
7. REFORMA POLÍTICA Pretendía incorporar a la estructura institucional todas las manifestaciones políticas representadas en los partidos de oposición.  La Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales (LFOPPE) impulsó la participación de grupos políticos opositores al régimen en espacios legales de participación.  Junto con la ley de amnistía conformaron medidas para reconstruir el consenso social con el sistema político.  Con ésta ley se permite el registro de nuevos partidos dando la apariencia democrática del sistema. 

El neoliberalismo en México
 
En el caso de México, el neoliberalismo inicia con la ruptura del modelo prevaleciente por más de tres décadas: el modelo de crecimiento económico, sustitución de importaciones, desarrollo hacia adentro y economía mixta.
Desde la década de los cuarenta, la estrategia de desarrollo en México, se sustentó en la protección del mercado interno, a través de barreras arancelarias y no arancelarias que mantuvieron al aparato productivo virtualmente aislado de la competencia internacional. El Estado, desempeñó un importante papel, al asumir un alto grado de intervencionismo y regulación de la actividad económica.
Prud´homme (1995), menciona que desde los setenta se puso en evidencia la fragilidad del modelo de sustitución de importaciones como proceso central del crecimiento económico, y con ello desaparecieron las bases de estabilidad; manifestadas en aspectos como: 1) el déficit público pasó a cumplir el papel de motor del crecimiento, y éste a su vez, condujo a un fuerte deterioro de la balanza de pagos;  2) al mismo tiempo, que el déficit externo como proporción del PIB aumentaba, sus fuentes tradicionales de financiamiento (la agricultura y los servicios) tendían a agotarse, lo cual obligó a recurrir en forma creciente al adeudamiento externo; 3) el crecimiento se vio interrumpido, por políticas contraccionistas, la inflación y la incertidumbre que estas propiciaban, abrieron la puerta a la especulación y la fuga de divisas; 4) el esfuerzo del estado por recuperar el crecimiento conducían a agravar los desequilibrios macroeconómicos, en su intento por mantener el modelo en funcionamiento realizó la exportación masiva de petróleo, más cuando se detuvieron, la situación se volvió insostenible y el país entro de lleno en un período de crisis y ajuste estructural.
Al inicio de los 80 el fenómeno que se venía perfilando desde la década anterior cumple su cometido, es decir; el modelo de desarrollo que anteriormente había asegurado el crecimiento económico y la estabilidad política en el México posrevolucionario estaba en crisis (Nava, 2000).
Es en el período presidencial de Miguel de la Madrid (1982-1988), cuando tiene su aplicación la estrategia neoliberal; inicia con la venta y privatización de las primeras empresas paraestatales 1; desmantelamiento, que abarca el régimen de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) y el de Ernesto Zedillo (1994-2000).
Durante el primer año del régimen de Miguel de la Madrid, el gobierno federal tenía participación en 45 ramas de la economía, para el último año, su participación abarcaba solo 23 ramas. En 1982, tenía el gobierno federal 1155 empresas, en 1988 poseía solamente 412. La desincorporación de estas empresas obedeció a que “no eran estratégicas ni prioritarias para el desarrollo nacional”, argumento presentado en un documento informativo por el gobierno federal (SHCP, 1988).